Descubre el Hotel Girasol: vacaciones en Mallorca con sabor vegano
El chef Víctor Manuel Martínez nos abre las puertas de su cocina que apuesta por la sostenibilidad y la salud.
En el corazón de Cala Millor, una de las joyas vacacionales de Mallorca, el Hotel Girasol ha incorporado una propuesta gastronómica que va más allá de satisfacer paladares: quiere dejar huella. Su nueva oferta vegana, respaldada por la solicitud del distintivo V-Places de la Unión Vegetariana Española, forma parte de una visión global de sostenibilidad y alimentación consciente.
La idea, como cuenta el chef Víctor Manuel Martínez, surge de una observación clara: ‘Cada vez más personas se interesan por opciones naturales, saludables y sostenibles. Nosotros queremos formar parte de ese cambio, cubrir esa demanda y, al mismo tiempo, enriquecer nuestra propuesta para todos los públicos’.
Situado junto a una playa privilegiada, el hotel busca ofrecer más que sol y descanso. Víctor destaca que ‘el hotel crea una experiencia familiar, activa y agradable. Incorporar opciones veganas no solo es una respuesta a las tendencias, sino también una forma de abrirnos a nuevos perfiles de cliente y de contribuir a una alimentación más respetuosa’.
Esta iniciativa no nació solo de la demanda de los huéspedes, aunque fue determinante. También hubo una fuerte motivación interna siendo el resultado de escuchar a quienes les visitaban, pero también por propia convicción, ya que según confirma el chef ‘hoy en día es más fácil encontrar productos certificados y con buena disponibilidad. Era el momento de dar el paso’.
Y para hacerlo bien, el equipo del Hotel Girasol sabía que necesitaba prepararse para ofrecer una carta vegana de calidad, nutricionalmente equilibrada y bien pensada. Por ello, el personal de cocina ha pasado por un proceso de formación que incluyó cursos de Nutrición y Dietética, Elaboración de Dietas, Cocina Vegetariana en Restauración y un Máster en Cocina Vegana, entre otros, siendo todo un reto, pero también una oportunidad para crecer profesionalmente.
Víctor comenta que la parte práctica fue más sencilla de lo esperado. ‘La operativa en cocina se integró rápido. Cuando el equipo está motivado y las ideas claras, todo fluye. Hoy en día es una partida más dentro del buffet del hotel’, asegura. De hecho, han conseguido que muchos de sus platos veganos gusten incluso a quienes no siguen esta dieta. Uno de los más populares es una coliflor gratinada con miso, pesto de tomate seco, anacardos e higos, que ha sorprendido gratamente por su sabor y originalidad. Otro éxito rotundo es la calabaza asada con crema thai de curry, jengibre y coco, que cada vez que se ofrece en el menú, desaparece de los platos.
Al ser un servicio de buffet, las posibilidades son amplias: ‘Queremos que la cocina vegana que proponemos sea rica, equilibrada y atractiva, tanto en sabor como en presentación. Incluimos ingredientes como tofu, tempeh, quinoa, seitán, mijo, frutos secos y licuados verdes, cuidando siempre la variedad y la nutrición’, comenta Victor.
Girasol en V-Places
La decisión de solicitar el distintivo de ‘opciones veganas’ llegó como una evolución natural. “Desde el primer momento, la UVE nos acompañó con claridad y predisposición. Nos sentimos identificados con su visión. Queríamos asociarnos a algo que refleje nuestro compromiso real, no solo una moda” afirma Victor.
V-Places es el directorio oficial de negocios veganos de la Unión Vegetariana Española (UVE) cuya finalidad es identificar establecimientos que ofrecen opciones 100 % veganas, vegetarianas o con opciones, facilitando a los consumidores encontrar lugares comprometidos con esta alimentación.
Para Los Girasoles, la propuesta plant-based forma parte de una política global de sostenibilidad que incluye el uso de productos de km0, reducción de plásticos de un solo uso, compostaje de residuos orgánicos, reciclaje y apoyo a negocios locales. Según el chef ‘es una apuesta por un modelo de turismo más responsable, que respete el entorno y a las personas. No se trata solo de cambiar ingredientes, sino de pensar cómo cocinamos, qué impacto generamos y cómo podemos mejorar’.
Desde su experiencia, Víctor considera que el sector hostelero aún tiene camino por recorrer: ‘Se está avanzando, pero en muchos sitios las opciones veganas se limitan a uno o dos platos. Es una oportunidad que muchos todavía no están aprovechando. Las cadenas ya están incluyendo más variedad, y eso empuja a los negocios pequeños a sumarse también’. Y el mensaje para otros hoteles o restaurantes lo tiene claro: ‘La cocina basada en vegetales no es una moda pasajera. Es una tendencia firme, con una base sólida de salud, sostenibilidad y ética. Adoptarla no es difícil si hay formación y compromiso. Y vale la pena. Es una forma de ofrecer una experiencia gastronómica más completa, más moderna y más consciente’.
Y esto no es un punto final, sino el inicio de una nueva etapa. En el Hotel Girasol ya trabajan en ampliar el menú vegano, transformando recetas tradicionales y experimentando con nuevos ingredientes, ya que ‘cuanto más nos formamos, más ideas surgen y cuanta más variedad ofrecemos, más ganas tenemos de seguir sorprendiendo’.
El Hotel Los Girasoles hace una apuesta valiente y con sabor, natural y respetuosa demostrando que en la hostelería vacacional hay espacio para innovar con sentido y sensibilidad.
