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¿Cuáles son las razones éticas que hay detrás del veganismo?

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¿Cuáles son las razones éticas que hay detrás del veganismo?

 

 

Cada 10 de diciembre se celebra el Día Mundial de los Derechos Animales, coincidiendo con la conmemoración de los Derechos Humanos. 

Desde 1997 se pone en valor las vidas de otros animales, más allá de la humana. De esta manera se visibiliza el especismo, la discriminación basada en la especie, similar al racismo o al sexismo, pero dirigida hacia otras especies animales que no sean la nuestra. Este concepto fue introducido por el psicólogo Richard D. Ryder en 1970 y se ha utilizado desde entonces en el ámbito ético y filosófico para abordar la discriminación hacia los animales no humanos.

 

En el contexto de la relación entre humanos y animales, el especismo se manifiesta en la creencia de que los intereses de los seres humanos son intrínsecamente más importantes o valiosos que los intereses de los animales no humanos. Esto a menudo se refleja en prácticas como la explotación animal en la industria alimentaria, la experimentación en animales, el uso de animales para entretenimiento, entre otras.

 

Algunas corrientes éticas y movimientos defensores de los derechos de los animales argumentan en contra de esta discriminación, abogando por un trato ético y respetuoso hacia todos los seres sintientes, independientemente de su especie. Estos movimientos antiespecistas promueven la idea de considerar los intereses y el bienestar de los animales no humanos de manera similar a cómo se consideran los intereses de los seres humanos. 

 

El antiespecismo es la posición ética que aboga por la igualdad moral entre humanos y animales, oponiéndose a la discriminación basada en la especie.

 

El veganismo se fundamenta en varias razones éticas, y las personas adoptan este estilo de vida por su preocupación acerca del trato a los animales, aunque también por otro motivos como el medio ambiente y la salud.

 

Sin embargo, cabe recordar que el veganismo nace de una idea muy concreta: abstenerse en el consumo de productos de origen animal por el sufrimiento y muerte innecesaria que este acto implica

 

Las personas eligen el veganismo como un estilo de vida y/o bien como una posición política, ya que ‘todo lo personal es político’ pues las elecciones individuales están interconectadas con estructuras más amplias de poder y políticas. En este sentido, abogan por políticas y cambios en la legislación que promuevan prácticas agrícolas más éticas, la reducción y abolición de la explotación animal y la promoción de una dieta basada en vegetales. 

 

Motivos éticos para abrazar el veganismo y el antiespecismo

 

Hay varios motivos éticos que llevan a las personas a abrazar el veganismo. Éstos están relacionados principalmente con el bienestar, los derechos de los animales, el antiespecismo, la igualdad y la justicia social. 

 

El aspecto más prominente es la preocupación por el bienestar de los animales. Las personas veganas y antiespecistas piensan los animales tienen derechos y no deberían ser utilizados como recursos para la alimentación, la experimentación o el entretenimiento. La cría intensiva, el confinamiento en jaulas y el sacrificio para obtener productos de origen animal son considerados prácticas éticamente cuestionables, lo que lleva a otro motivo: el maltrato y sufrimiento animal. 

 

La industria alimentaria y otras industrias que utilizan animales, están asociadas con prácticas de maltrato, sufrimiento y muerte innecesaria de los animales. Diariamente se estima que dentro de la industria cárnica mueren: 900.000 vacas, 1,4 millones de cabras, 1,7 millones de ovejas, 3,8 millones de cerdos, 11,8 millones de patos y más de 200 millones de pollos cada día. Respecto a los animales marinos es imposible calcular la cifra, pero se estima que para el consumo humano mueren 157 millones de tonelada de peces por año, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.

 

Tanto la preocupación del bienestar animal y el maltrato están ligadas al antiespecismo, la posición ética que aboga por la igualdad moral entre humanos y animales, oponiéndose a la discriminación basada en la especie. El antiespecismo busca superar la idea de que los intereses y derechos de los humanos son inherentemente más valiosos que los de los animales no humanos.

 

Algunas de los principales conceptos asociadas con el antiespecismo y su relación con la justicia para los animales son:

  • Igualdad moral: El antiespecismo sostiene que todos los seres sintientes, independientemente de su especie, tienen un valor intrínseco y merecen ser considerados moralmente. Esto implica tratar a los animales con respeto y consideración, reconociendo que sus intereses y derechos merecen consideración ética.

 

  • Abolición de la explotación animal: Los antiespecistas defienden la abolición de prácticas que explotan a los animales, como la cría intensiva para la alimentación, la experimentación y el uso de ellos para el entretenimiento. Las personas antiespecistas y veganas, consideran que estas prácticas son moralmente problemáticas y siempre se buscan alternativas éticas para que no se lleven a cabo.

 

  • Conciencia de la interconexión: El antiespecismo reconoce la interconexión entre la explotación de animales, la sostenibilidad ambiental y la justicia social. La producción industrial de alimentos, que a menudo involucra la explotación de animales, tiene impactos significativos en el medio ambiente y puede contribuir a problemas sociales como la pobreza y la desigualdad.

 

  • Promoción de cambios legales y sociales: Las personas que luchan por los derechos animales buscan cambios en las leyes y normas sociales para brindar una mayor protección y consideración a los derechos de los animales. Esto puede incluir regulaciones más estrictas sobre prácticas agrícolas, prohibiciones de ciertas formas de experimentación en animales y otras medidas destinadas a mejorar el trato hacia los animales, persiguiendo como último objetivo la abolición. 

 

 

La justicia y el respeto hacia los animales conlleva un cambio en la percepción cultural y social en la que vivimos, poniendo de manifiesto los privilegios que tenemos como personas, lo que a veces puede generar conflictos de interés. Tener una visión más completa, conocer la realidad de los animales, los motivos éticos que mueven a cierta parte de la población a luchar y a ser activa para mejorar las condiciones de vida y tratamiento de los animales en diversas situaciones, harán de nuestra sociedad un lugar mejor para los animales, humanos o no. 

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